Persona que no trabaja no es un sobreviviente, es un Super-Viviente.
Antes de convertirme en empresaria, yo también estuve sin trabajo. Sé muy bien el desánimo, la incertidumbre, el pesimismo, la frustración, la impotencia, el miedo, el dolor, el sentirse no suficiente y la desesperación que sientes cuando no encuentras un laburo. Desde el año pasado veo muchos mensajes de personas pidiéndome que les ayude a buscar trabajo y pese a que el Outplacement y el HeadHunting no son mi core de negocio, he ayudado con mucho gusto sin fines de lucro, sin embargo, creo que, ante la demanda de ayuda, quiero decirte que una gran alternativa es mi amiga y mentora Inés Temple de DBM para poder acompañarte en tu búsqueda de empleo, mejorando tu marca personal a la hora de conseguir trabajo.
La desesperación no abre puertas
La vida no es fácil y a veces pega fuerte pero la desesperación no es buena consejera y la ansiedad tampoco, por esa razón es que muy pronto les avisaré con mucha felicidad lo que les tenemos preparado para ustedes por el simple hecho de ayudar, porque yo también sé lo que se siente y si hoy por hoy estoy en la posición de ayudarte, con mucho gusto lo haré.
Que nunca te dé vergüenza tocar puertas para pedir trabajo, vergüenza debería de sentir la gente que roba, que humilla, que miente. No importa de qué trabajes, el trabajo siempre dignifica así que siéntete orgulloso de ser un trabajador(a) valiente que día a día se saca la mugre por sus sueños. Nadie dijo que sería fácil, pero lo estás haciendo posible, por si no te habías dado cuenta o nunca te lo habían dicho, eres una MUJER VALIENTE y hoy día vamos a celebrar eso, independientemente de cómo te esté yendo en el año. ¡Hoy yo brindo por ti!
La sonrisa abre puertas, la soberbia las cierra
Uno de los trabajos más importantes que tuve fue cuando trabajé de mesera y cajera en una cafetería en un sky resort en los Estados Unidos. Recuerdo que estaba en la universidad pero que quería experimentar un intercambio cultural en donde a su vez podía ganar dinero. El cambio fue brutal, especialmente por el idioma, mi inglés era bueno en teoría, pero en la práctica fue un desastre, los gringos hablaban muy rápido, no les entendía nada y eso era un problema ya que al ser la cajera, tenía que saber muy bien qué pasar por caja porque si me equivocaba me lo cobraban a mí.
Era un trabajo muy estresante y bajo presión, pero que al mismo tiempo me ayudó un montón para saber adaptarme al cambio, tratar y servir bien siempre al cliente con una sonrisa, aunque no te la devuelvan siempre, además fue todo un MBA en contabilidad intensiva que aprendí en la cancha. Quizás por eso trato siempre de “tú” a los meseros(as), tengo paciencia si la cuenta está errada y no me quejo por tonterías con la gente que en ese momento les toca servir.
La vida da muchas vueltas, el poder de la humildad te ubica siempre para tener más empatía con el otro siempre. Siempre lo digo, la sonrisa abre puertas, la soberbia las cierra. Ser mesera fue un trabajo digno que me enseñó a pensar rápido y a tener la suficiente humildad para enfrentar los problemas, siempre con amor y con humor ante los retos que los clientes me pusieran desde un mal vuelto dado, un reclamo por una confusión de bebidas, preguntas de “dónde está el baño” y mil objeciones más que desarrollaron mi paciencia, pero sobretodo mi madurez y empatía para poder negociar y comunicar.
Fue ése trabajo el que me dió tantos otros, porque me enseñó a que no importa qué pasa, siempre hay que ir con una sonrisa por delante, un plan de acción rápido para atender al cliente y enfrentar los problemas que vengan en el camino porque créeme, HABRÁ PROBLEMAS, no uno, MILLONES.
Pretender que no los habrá es una falsa ilusión, entonces más allá de encontrar “el trabajo”, que de seguro lo harás, es solo el PRIMER PASO, pero lo que realmente te debe de ocupar la mente es el SOSTENER Y DISFRUTAR cualquier trabajo en el que te encuentres. Ese es el verdadero reto del eterno aprendiz.
Desde siempre, nos han enseñado que en la vida existe un determinado orden para el éxito. Entonces, si en la vida quieres triunfar, tienes que ir al colegio, luego tienes que entrar a la Universidad, para luego hacer una maestría o un MBA para encontrar un mejor trabajo y una vez estable, quizás te plantees hacer un PHD, con el único afán de sentir la realización profesional establecida por patrones tradicionales que determinarán si eres exitoso o no. Lo que me hace reflexionar sobre si el éxito realmente tiene un orden y un tiempo determinado.
Creo firmemente que el orden lo pones TÚ cuando te atreves a ir tras tus sueños a pesar de los mete cabe, la injusticia, las difamaciones, las descontextualizaciones y los problemas. Quiero decirte también que la vida no siempre es fácil ni dulce, que también es difícil y agria pero que a pesar de todo y contra todo pronóstico, DIOS (buda, energía, ala, jehová, llámalo como quieras), siempre está con la gente HACEDORA Y QUE LEJOS DE SÓLO ENFOCARSE EN DIAGNOSTICAR PROBLEMAS, TAMBIÉN SE DA EL TIEMPO DE CALIDAD PARA ENCONTRAR SOLUCIONES.
Mis respetos a la gente que se atreve a empezar de nuevo a pesar de todo, de los años y los daños, ya sea en un trabajo nuevo como ejecutivo dependiente o como nuevo emprendedor(a). Sea lo que sea que decidas ser, recuerda siempre que TÚ PUEDES SIEMPRE y que independientemente de lo que digan los demás, si estás muy viejo(a), muy sobrecalificado, sin experiencia, no creen que encajes por x razones, atrévete a ser LA EXCEPCIÓN a la regla y hazlo igual.
Quiero decirte que puede que hoy no tengas el trabajo de tus sueños o ningún trabajo, pero LÉEME BIEN cuando te digo que eso NO DETERMINA NI DEFINE la talentosa y grandiosa persona que eres realmente. No tener trabajo no te hace menos que nadie y mucho menos te hace un sobreviviente porque tú no estás acá para dar lástima ni pena, tú estás acá para probarte a ti misma que puedes, que quieres y que tienes las ganas de hacer que tus sueños pasen, sólo tienes que creer en ti, trabajar en ti y lo demás siempre vendrá por default. Así que no pasa nada si no consigues trabajo ahora, sigue disfrutando de este tiempo maravilloso para conocerte mejor, repensar lo que quieras hacer en la vida y seguir aprendiendo en este camino llamado vida, eres un SUPERVIVIENTE y lo mejor siempre está por venir, aunque no parezca.
Sinceramente quiero que estés bien, You got the Power, úsalo para el bien, fácil es destruir, difícil es construir.
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¡Te mando un abrazo gigante!
Ana Romero | mujerespower.com.pe
